Ayesa supervisa grandes obras ferroviarias en toda España que superan los 600 kilómetros

Los últimos contratos logrados son la consultoría y asistencia técnica de 14 kilómetros de alta velocidad entre Calahorra de Boedo-Alar del Rey de la línea Palencia-Santander. Así como la supervisión de dos nuevas vías y un andén, dentro del proyecto de remodelación de la estación de Atocha en Madrid.

Ayesa, proveedor global de servicios de tecnología e ingeniería, mantiene desplegados por toda España equipos de supervisión de obras ferroviarias. Partícipe del proceso de mejora y expansión de la red convencional y de alta velocidad del país desde hace más tres décadas, la firma acumula una vasta experiencia en cualquier geografía. Así, a día de hoy, está participando de forma simultánea en proyectos que superan los 600 kilómetros.

Uno de los últimos contratos logrados ha sido la consultoría y asistencia técnica del tramo Calahorra de Boedo-Alar del Rey perteneciente a la línea de alta velocidad Palencia-Aguilar de Campoo. Esta obra está presupuestada en 109,5 millones de euros y tiene un plazo de ejecución de tres años.

En este tipo de actuaciones, Ayesa es la compañía encargada de supervisar la ejecución de la construcción en sentido amplio, abarcando el control del presupuesto, el plazo y la calidad, y velando porque se cumplan todas las exigencias en materia medioambiental, de seguridad y salud.

También presta asesoramiento técnico en las distintas disciplinas implicadas en el proyecto, incluidas posibles expropiaciones.

El nuevo tramo Calahorra de Boedo-Alar del Rey tendrá una longitud de casi 14 kilómetros y permitirá a los trenes alcanzar una velocidad máxima de 350 Km/h.

Otro de los últimos contratos iniciados es la supervisión de la construcción de dos nuevas vías y un andén en la estación de Atocha, obra licitada por Adif Alta Velocidad con un presupuesto de 54,5 millones.

Esta infraestructura se enmarca en la remodelación que está acometiendo el operador ferroviario para ampliar la capacidad de la terminal madrileña y que conlleva una inversión global de 650 millones.

La actuación más ambiciosa será la nueva estación pasante subterránea para unir toda la red de alta velocidad de Madrid. Su construcción afectará a dos de las 15 vías de alta velocidad existentes en Atocha, y de ahí el objeto de este contrato, cuyo fin es que el tráfico ferroviario no se vea perjudicado.

A estos proyectos se suman otros actualmente en vigor como las actuaciones en la estación de La Sagrera en Barcelona, el nuevo acceso ferroviario al sur del Puerto de Castellón, el acceso ferroviario al Puerto de Sagunto y el nudo de Bergara en la Y vasca o la renovación. Igualmente, destacan la superestructura de vía del corredor de alta velocidad Madrid-Sevilla, la renovación de vía entre Brazatortas y Guadalmez y la renovación integral de infraestructura y vía en un tramo del corredor Zafra-Huelva.

Álvaro Bravo, jefe de Sección de Supervisión de Obras y PMO en Ayesa, subraya la importancia de estos proyectos “por su positivo impacto en la conectividad de centros urbanos importantes, la efectiva reducción de tiempos de transporte para los ciudadanos y el refuerzo del ferrocarril como modo de transporte de mercancías en España”.